
UNA HISTORIA DE VALENTÍA Y DETERMINACIÓN
A lo largo de la historia, las mujeres han desafiado los límites en el mundo de la náutica, rompiendo barreras y dejando su huella en mares y océanos. Desde la legendaria pirata irlandesa Grace O’Malley, que comandó su propia flota en el siglo XVI, hasta Jeanne Baret, la primera mujer en dar la vuelta al mundo en barco (aunque disfrazada de hombre en el siglo XVIII).
Os contamos la historia de 8 mujeres que han marcado un antes y después en nuestro sector.

Jeanne Baret
Jeanne Baret (1740-1807) fue una botánica y exploradora francesa, reconocida como la primera mujer en dar la vuelta al mundo. Para lograrlo, tuvo que disfrazarse de hombre, ya que en aquella época las mujeres tenían prohibido embarcar en expediciones navales.
Baret era experta en plantas y trabajaba junto al naturalista Philippe de Commerson, quien fue invitado a unirse a la expedición de circunnavegación del explorador francés Louis Antoine de Bougainville (1766-1769). Como su asistente, Jeanne se embarcó en el barco Étoile vestida como un hombre y bajo el nombre de “Jean Baret”.
Durante el viaje, ayudó a recolectar y clasificar numerosas especies de plantas, incluyendo la Bougainvillea, la flor que lleva el nombre del líder de la expedición. Sin embargo, su identidad fue descubierta en Tahití, posiblemente por los propios habitantes locales o por la tripulación del barco.
Rose de Freycinet
Rose de Freycinet (1794-1832) fue una exploradora francesa y una de las primeras mujeres en documentar un viaje de circunnavegación. Se hizo famosa por embarcarse en secreto en la expedición científica de su esposo, el navegante Louis de Freycinet, a bordo del barco Uranie (1817-1820).
En una época en la que las mujeres tenían prohibido viajar en expediciones navales, Rose desafió las normas al subir al barco disfrazada de hombre. Pronto, su presencia fue aceptada por la tripulación, y durante el viaje mantuvo un diario detallado en el que describía la vida a bordo, las culturas que encontraban y los desafíos que enfrentaban.
Su diario, publicado póstumamente, es una valiosa fuente histórica que ofrece una perspectiva única sobre la exploración marítima del siglo XIX desde el punto de vista de una mujer. Su valentía y determinación la convierten en una figura fascinante de la historia de la náutica.


Lillian Gilbreth
Lillian Gilbreth (1878-1972) fue una ingeniera industrial con aplicaciones en la industria naval, psicóloga y pionera en la ergonomía y la gestión del trabajo. Es conocida por su trabajo en la eficiencia del movimiento y la mejora de las condiciones laborales, junto a su esposo, Frank Gilbreth.
Lillian aplicó principios científicos para optimizar el rendimiento en fábricas y oficinas, siendo una de las primeras personas en integrar la psicología en la ingeniería industrial. Su trabajo influyó en el diseño de herramientas, espacios de trabajo e incluso electrodomésticos para hacer más eficientes las tareas diarias.
- Fue una de las primeras mujeres en la ingeniería industrial y la primera en recibir una cátedra en ingeniería en EE.UU.
- Desarrolló mejoras en la organización del trabajo en la industria y la sanidad.
- Trabajó en el diseño de cocinas más funcionales y en mejoras ergonómicas para discapacitados.
- Fue asesora del gobierno de EE.UU. y de grandes empresas en temas de eficiencia laboral.
Aunque no estuvo directamente involucrada en la ingeniería naval, sus estudios de ergonomía y eficiencia influyeron en múltiples industrias, incluida la marítima.
Naomi James
Naomi James (n. 1949) es una navegante neozelandesa que hizo historia al convertirse en la primera mujer en circunnavegar el mundo en solitario y sin escalas en 1978.
Sin mucha experiencia previa en navegación oceánica, Naomi se inspiró en el legendario navegante Francis Chichester y decidió embarcarse en la travesía. Zarpó el 9 de septiembre de 1977 desde Dartmouth, Inglaterra, a bordo del Express Crusader, un velero de 53 pies.
Durante su viaje, tardó 272 días en completar la vuelta al mundo, enfrentando tormentas, un mástil roto y largos períodos de soledad extrema. Al llegar a Inglaterra el 8 de junio de 1978, había batido el récord mundial al reducir en dos días el tiempo establecido por Chichester.
Naomi James demostró que con coraje y perseverancia, los límites en el mar—y en la vida—están hechos para romperse.


Raye Montague
Raye Montague (1935-2018) fue una ingeniera naval estadounidense que revolucionó el diseño de barcos de guerra. Se le atribuye el desarrollo del primer buque de guerra diseñado completamente por computadora, un avance que transformó la industria naval.
Desde pequeña, Raye soñaba con ser ingeniera, pero debido a la segregación racial en EE.UU., no se le permitió estudiar ingeniería formalmente. Aun así, obtuvo un título en negocios y matemáticas y comenzó a trabajar en la Marina de EE.UU. como programadora de computadoras.
Durante la Guerra Fría, cuando un diseño de submarino soviético sorprendió a EE.UU., Montague fue asignada a mejorar los sistemas de diseño naval. En 1971, logró automatizar el proceso de diseño de embarcaciones, reduciendo de dos años a solo 18 horas el tiempo necesario para crear el plano de un buque.
Su historia de perseverancia y talento inspiró a generaciones de mujeres e ingenieros, demostrando que la innovación no conoce barreras.
Celia Sánchez Ramos
Celia Sánchez Ramos (n. 1957, España) es una científica, investigadora y experta en neurociencia y optometría, reconocida por sus avances en la protección de la visión. Aunque no es ingeniera naval, ha trabajado en el desarrollo de tecnologías aplicadas a la seguridad marítima.
- Especialista en protección ocular contra la radiación y la fatiga visual.
- Ha desarrollado sistemas de identificación biométrica a partir de características del ojo.
- Su trabajo ha tenido aplicaciones en sectores como la seguridad, la medicina y la industria marítima.
- Ha recibido numerosos premios y reconocimientos a nivel internacional por sus innovaciones científicas.
Si bien su enfoque principal es la optometría y la neurociencia, su investigación ha tenido un impacto en la navegación, especialmente en la seguridad de los marineros y en la protección visual en entornos marítimos.


Anna Shchetinina
Anna Shchetinina (1908-1999) fue una capitana de barco soviética y una pionera en la navegación marítima. Se convirtió en la primera mujer en el mundo en ser capitana de un buque mercante de gran tonelaje.
En 1935, a los 27 años, asumió el mando de un barco de carga, algo inédito para una mujer en esa época. Durante la Segunda Guerra Mundial, transportó suministros y tropas a zonas de combate, enfrentando bombardeos y condiciones extremas. Tras la guerra, continuó su carrera como capitana y profesora de navegación, formando a futuras generaciones de marinos.
- Recibió numerosos premios y condecoraciones por su valentía y liderazgo.
- Es considerada un símbolo de igualdad de género en la marina y un ejemplo de determinación.
Anna Shchetinina demostró que el mar no entiende de géneros, solo de coraje y habilidades.
Hélène Rother
Hélène Rother (1908-1999) fue una diseñadora y arquitecta francesa, conocida por su trabajo en el diseño industrial y la ingeniería, así como por su contribución en la industria automotriz y naval. Aunque su enfoque principal fue el diseño de automóviles, también tuvo un impacto en la ergonomía y el diseño interior de barcos.
Durante la Segunda Guerra Mundial, trabajó en la industria de defensa en Estados Unidos, donde aplicó sus conocimientos de diseño a la fabricación de vehículos militares. Fue una de las primeras mujeres en obtener un título en ingeniería en Francia, enfrentándose a las barreras de género en una época en que pocas mujeres podían acceder a carreras técnicas. Después de la guerra, Rother trabajó para varias empresas automotrices, donde diseñó interiores y elementos funcionales que mejoraron la experiencia del usuario.
- Su trabajo influyó en el diseño de automóviles y también se extendió a la mejora de las condiciones en el diseño de embarcaciones, contribuyendo a la ergonomía en la industria naval.
- Rother es recordada como una pionera en un campo dominado por hombres, demostrando que las mujeres podían aportar significativamente a la ingeniería y el diseño.
A través de su trabajo, Hélène Rother dejó un legado duradero en la ingeniería y el diseño, sirviendo de inspiración para futuras generaciones de mujeres en el campo.

A lo largo de la historia, las mujeres han demostrado que el mar no entiende de géneros, solo de valentía, determinación y habilidad. Desde las pioneras que desafiaron las normas hasta las ingenieras y navegantes que siguen innovando hoy en día, su legado es una inspiración para futuras generaciones. En un sector que sigue evolucionando, es fundamental reconocer y apoyar la presencia femenina en la náutica.
¿Conoces alguna mujer que haya dejado su huella en el mundo marítimo? ¡Déjanos tu comentario!